El comité de empresa de DIAVIDA (UGT, CCOO, USO y CGT) exigió hoy en una rueda de prensa la implicación del Gobierno de Cantabria para poner fin al deterioro progresivo del servicio del transporte sanitario programado por la escasez de personal y los reiterados incumplimientos de la concesionaria en el retraso del pago de los salarios, el pliego de condiciones, el convenio colectivo y la prevención de riesgos laborales".

Según precisó el presidente del comité de empresa de DIAVIDA en Cantabria, José Alberto Ibarguen (UGT), "lo que está ocurriendo conlleva la responsabilidad compartida tanto de la empresa como de la Administración y por mucho que denunciemos, es el Gobierno de Cantabria el que tiene que dar un puñetazo sobre la mesa porque, de lo contrario, la situación se agravará todavía más".

El sindicalista recordó la huelga general convocada el pasado 28 de noviembre en las ambulancias del transporte sanitario programado o no urgente, que terminó con un acuerdo ese mismo día de empresa concesionaria y sindicatos "que no se ha cumplido en ninguno de sus puntos porque DIAVIDA sigue incumpliéndolo todo".

En este sentido, Ibarguen recalcó que "no nos permitieron hacer esa huelga con unos servicios mínimos de casi el 100% que incumplían lo que se había pactado, aunque, si esto no cambia, tendremos que volver a las movilizaciones y hacerlo de otra manera con los servicios mínimos".

El presidente del comité de empresa de DIAVIDA en Cantabria reiteró la responsabilidad compartida de Gobierno de Cantabria, Consejería de Sanidad, Servicio Cántabro de Salud (SCS) y Gerencia de Atención Primaria "en actuar inmediatamente y poner soluciones".

El sindicalista recordó los numerosos expedientes sancionadores de la empresa concesionaria valenciana en sus cuatro meses de servicio en Cantabria en los que "no negocia ni informa a los sindicatos, sigue habiendo retraso en el pago de los salarios cada mes, no ha presentado ni el plan de formación ni el de prevención de riesgos laborales, ha impuesto el calendario laborales y acumula constantes retrasos en los desplazamientos por la falta de personal".

Además, Ibarguen destacó que la empresa concesionaria sigue incumpliendo también la obligación de que servicios que requieren dos técnicos tal y como estipula el pliego de condiciones, "siguen realizándose con sólo uno".

Ibarguen aclaró que la concesionaria inició su trayectoria en Cantabria con "una plantilla de 136 trabajadores que ya venía justa de la anterior concesionaria, Ambuibérica, pero ahora faltan como mínimo 30 trabajadores, aunque no se sabe con exactitud porque la empresa no facilita a los sindicatos el número de excedencias, bajas voluntarias y bajas de incapacidades temporales.

"Hay trabajadores que ante la situación actual ya han pedido la cuenta", agregó el sindicalista, que recordó que "llevamos en este servicio esencial para la sociedad más de 26 años y nunca se había llegado a lo que está pasando hoy".

Ibarguen recordó que "DIAVIDA rebajó en más de un millón de euros el presupuesto para hacerse con la concesión del servicio y, si no tiene liquidez económica para mantenerlo, el Gobierno de Cantabria tendrá que tomar cartas en el asunto porque no está cumpliendo ni con su plantilla ni con la calidad de un servicio esencial para la ciudadanía".

Inspección "demoledora" en prevención de riesgos
Por su parte, Gildo Cabañeros, delegado de prevención del comité de empresa de DIAVIDA en Cantabria, agregó a las críticas sindicales "un informe demoledor" de la Inspección de Trabajo sobre los incumplimientos en la normativa de prevención de riesgos laborales "en una actividad en la que estamos expuestos a riesgos biológicos".

En este sentido, Cabañeros subrayó que, por esos riesgos biológicos, la empresa concesionaria está obligada a dotar de equipos de protección individuales (EPIs) y a la limpieza del vestuario un número determinado de veces, "y no lo hace porque, además, sigue sin habilitar vestuarios, duchas o taquillas en las bases, incumpliendo las normas más básicas de prevención y forzando al personal a llevarse la ropa a casa".

El delegado de prevención extendió estos incumplimientos a las bases operativas de la concesionaria de las ambulancias del transporte sanitario programado de Cantabria en Santander, Torrelavega, Reinosa y Laredo, aunque destacó la especial gravedad de la nave laredana.

A todo ello, Cabañeros añadió que "por incumplir, la empresa ni siquiera realiza la desinfección de las ambulancias con los productos requeridos "y más en una ambulancia".

Audio José Alberto Ibarguen