La primera reunión de negociación del nuevo convenio colectivo del metal o de la industria siderometalúrgica de Cantabria, tras la convocatoria de los dos primeros días de huelga el 3 y 5 de junio por parte de los sindicatos, ha concluido hoy sin acuerdo en el ORECLA (Organismo de Resolución Extrajudicial de Conflictos Laborales).

Según precisan la Federación de Industria, Construcción y Agro (UGT-FICA) y sus homólogas de CCOO y de USO, se mantienen por tanto la convocatoria de los dos días mencionados de huelga que se convertiría en huelga general indefinida a partir del 9 de junio si no se lograra un acuerdo para entonces.

Según aclara el secretario general de UGT-FICA en Cantabria, Luis Díez, “estamos en lo mismo, la patronal Pymetal sigue jugando con una negociación en la que se desdice de acuerdos ya alcanzados con anterioridad e incluso rebaja su propuesta de incremento salarial”.

“Es más de lo mismo, Pymetal ni siquiera respeta lo ya pactado y en cada negociación lo cambia todo y ahora plantea que no retira el plus de distancia como le hemos demandado los sindicatos pero a cambio de eliminar otros derechos y ofrecer menos aumento salarial”, subraya el secretario general de UGT-FICA en Cantabria.

El sindicalista recordó que desde el anterior convenio colectivo, que se firmó en 2022 tras 21 días de huelga general, más de 22.000 trabajadores y trabajadoras del sector siderometalúrgico cántabro han perdido cuatro puntos de poder adquisitivo en comparación al IPC y “tenemos muy claro que el incremento salarial en este nuevo convenio tiene que permitir recuperar ese poder adquisitivo”.

Díez agregó que “en 2022 los empresarios se quejaban del contexto económico para justificar una menor subida salarial, aunque ahora, que ya no les quedan excusas y ganan dinero como nunca, siguen en las mismas”.“Por lo que se ve, Pymetal sigue sin aprender la lección de lo que sucedió en la huelga general de hace tres años”, concluyó el secretario general de UGT-FICA en Cantabria.